Es como remar en la niebla, o programar un video sin instrucciones, ni un menor al lado que se encargue de la tarea. Es como rezar tras perder la fe, o besar tras olvidar el amor. Pero ante todo es perder, y olvidar cuanto se deja atrás, como los trenes al abandonar la estación.
Eso es lo interesante de la vida... el ir sin frenos. Al fin y al cabo, los frenos son barreras que se le ponen a la vida, obstáculos innecesarios.
ResponderEliminarEs como remar en la niebla, o programar un video sin instrucciones, ni un menor al lado que se encargue de la tarea. Es como rezar tras perder la fe, o besar tras olvidar el amor.
ResponderEliminarPero ante todo es perder, y olvidar cuanto se deja atrás, como los trenes al abandonar la estación.