lunes, 25 de octubre de 2010

Horizonte Ceniza (XXXVI)

Cuando ya no queda nada, quedan las cenizas.

1 comentario:

  1. Las cenizas no se limitan a ser un residuo: son un claro recordatorio de lo caro que se pagan los errores, un doloroso monumento a lo que nunca se ha de recuperar.

    El propio ánimo se tiñe de gris, y el horizonte se vislumbra sucio y ceniciento.

    ResponderEliminar