martes, 22 de mayo de 2012

Se escribe

Se escribe porque una luna está en cuarto menguante. Se escribe cuando el lobo aúlla y el crío sueña. Se escribe buscando los lápices sin punta. Se escribe igual que se duerme. Se escribe si se busca y no se encuentra. Se escribe porque hay cenizas como rosas. Se escribe como se besan las ventanas en los días de lluvia. Se escribe igual que se pierde un gato en los callejones. Se escribe entre gradas y futuros que agotan la paciencia del pasado. Se escribe pensando en lo perdido. Se escribe porque se pierde la memoria. Se escribe como la historia cuenta su cuento. Se escribe por no llorar. Se escribe para saber el color de la arena en pleno Agosto. Se escribe porque resulta insano lo vulgar de los recuerdos. Se escribe igual que se huye. Se escribe entre pupitres de serpentinas. Se escribe cuando nada ha de quedar y sin embargo queda. Se escribe como la esperanza ocupa los primeros asientos de la comedia. Se escribe por no dejar pasar los amores en sepia. Se escribe por los amores. Se escribe por los padres. Se escribe por entender los cuatro renglones de los jardines. Se escribe porque se hace tarde. Se escribe porque éramos jóvenes. Se escribe a sangre fría. Se escribe aunque te suena raro. Se escribe a cambio de una tienda, a cambio de una gitana que muestra sus encantos mientras los carruseles giran. Se escribe porque el verano pasa. Se escribe  porque el pasado se queda en la balconada. Se escribe, claro que se escribe, porque son palabras el viento en el regazo. Se escribe como el feriante dice basta en los caminos. Se escribe y no se sueña. Se escribe y las palabras son nuevas. Se escribe y un delfín asoma entre el oleaje, y las correspondencias manuscritas fueron suficiente para que el canto respondiera a mis plegarias. Se escribe como se reza, sin dioses a los que adorar en iglesias vacías.

No hay comentarios:

Publicar un comentario